A través de un comunicado de prensa, la Cámara del Libro de La Paz hizo conocer su preocupación por la apatía del gobierno, que hasta la fecha no resolvió la responsabilidad para la emisión de Deposito Legal (DL), paralizado desde hace más de cuatro meses.
“El motivo de este desorden, que afecta especialmente a la protección del patrimonio bibliográfico nacional, es político. Desde la desaparición del Ministerio de Culturas, los viceministerios y direcciones que estaban bajo el paraguas de esa cartera de Estado quedaron en la nebulosa y hasta el día de hoy no hay soluciones al respecto” señala el comunicado.
El trámite del DL está normado por el Decreto Supremo (DS) 28598, del 19 de enero de 2006, y no solo forma parte de la identidad de un libro, sino que constituye un paso indispensable para su legalidad. Por lo tanto, sin DL, un libro no es formalmente legal.
“Uno de los requisitos para la publicación de todo documento es contar con un número de Depósito Legal (DL), pero, en Bolivia, ni escritores ni editores pueden acceder a uno desde hace cuatro meses y los libros se vienen imprimiendo sin esa formalidad que, entre otros beneficios, permite resguardar el patrimonio intelectual de los bolivianos”, complementa el documento.