Por: Alfredo Zaconeta Torrico
Lo que lo advirtió como ministro de Economía y Finanzas Públicas, hoy lo cumple como presidente del Estado.
El modelo neoliberal que consolidó durante su paso como ministro del gobierno de Evo Morales, es el que hoy le sirve para proceder con masacres blancas, como medio de solución ante el descalabro administrativo de su misma gestión.
Bolivia atravesó por periodos traumáticos de despidos masivos, todos ellos ligados a gobiernos autoritarios, de facto y neoliberales. El recuerdo más reciente es la “relocalización” impuesta por el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) en 1985 por Víctor Paz Estenssoro, que dejó en la calle a mas de 20.000 mineros de la minería estatal con el Decreto Supremo (DS) 21060.
Arce hoy cumple con sus sentencias, recurriendo a las recetas neoliberales que tanto cuestiona desde sus machacones discursos. Lo advirtió en septiembre de 2015 señalando “Somos claros en eso, empresa pública del Gobierno central, que está bajo tuición nuestra, que no genere utilidades, que no esté bien manejada, hay que cerrarla. El Estado no irá a subvencionar ninguna empresa pública”.
Lo ratificó en mayo de 2016 aseverando: “Toda empresa que no sea capaz de generar ingresos y por lo tanto, de sustentarse, no puede ser empresa pública, el Estado no va a subsidiar a las empresas, no hay subvención a las empresas públicas”.
Hoy el nostálgico ex simpatizante de Marcelo Quiroga y el Partido Socialista (PS1), sin empacho alguno manda a la calle -como buen patrón- a decenas de trabajadores de la Administración de Aeropuertos y Servicios Auxiliares a la Navegación (ASAANA), que no conforme con eso, anuncia que con la nueva empresa Navegación Aérea y Aeropuertos Bolivianos (NAABOL) se pretende bajar en un 50% la planilla, suprimiendo el pago del bono de antigüedad, horas extras y recargos nocturnos, ergo, con el DS 4630, lo que se vive es una desregulación del mercado de trabajo, y una profundización de la flexibilización laboral.
El funcionalismo de la dirigencia de la COB hacia el gobierno del MAS, los hace cómplices de la medida, que atenta contra el porvenir de las decenas de familias de los trabajadores de ASAANA, considerando esto, ¿qué empresa estatal hoy es rentable?, bajo la sentencia de Arce ¿qué empresa sigue en su lista?
A contracorriente de lo que sucede con el respeto de los derechos laborales y con claros fines político partidario, el proyecto de Presupuesto General del Estado (PGE) para la gestión 2022, dispone 119.789.723 millones de bolivianos para la “Política de Coordinación Comunicacional” del Ministerio de la Presidencia, este monto representa un aumento del 62% respecto a lo presupuestado en el PGE 2021, entonces ¿cuál es la prioridad de este gobierno pseudo socialista?
El gobierno de Arce recurre a la receta neoliberal de la flexibilidad laboral como estrategia de competitividad, para tapar las falencias del modelo de gobierno del MAS, que hoy arroja sus saldos trágicos, colocando a centenares de trabajadores en la calle.
Conclusión, la reactivación económica que tanto pregona el gobierno de Luis Arce, hoy no reactiva el empleo, por el contrario, lo precariza y en algunos casos como el de ASAANA, lo elimina.
Alfredo Zaconeta es periodista
