“La reelección (indefinida) no es un derecho humano”, afirmó ayer el Secretario General de la OEA, Luis Almagro, basado el documento elaborado por expertos en derecho constitucional y electoral de Corea del Sur, España, Estados Unidos, Finlandia, Francia y México, integrados en la Comisión de Venecia.
El presidente Evo Morales y su partido señalan desde septiembre del año pasado lo contrario. El Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) comulgó con la mirada del gobernante Movimiento al Socialismo (MAS) y decidió en noviembre de 2017 “inaplicar” el artículo 168 de la Constitución para dar gusto a Morales y habilitarlo para las elecciones de 2019.
Almagro cuestionó a presidentes de la región por habilitarse a una nueva reelección pese a que su Constitución lo prohíbe (como el caso del Estado Plurinacional de Bolivia) y lamentó que se recurriera a sentencias judiciales para ese fin y no a una reforma de la Constitución como debe ser.
El ministro de Justicia, Héctor Arce, descalificó esta mañana al Secretario General de la OEA. «Almagro acudió a un órgano foráneo, que no responde a nadie, para forzar sus intenciones erróneas, mezquinas y sectarias», dijo y agregó que los fallos de la Comisión de Venecia no son vinculantes para ningún estado.
“Iniciamos este proceso por la mala y reiterada práctica regional de modificar la Constitución durante el mandato para buscar la reelección o la posible perpetuación en el poder”, declaró ayer Almagro.
Según Arce, sólo la Comisión y la Corte Interamericana de Derechos Humanos se encuentran facultadas para interpretar y aplicar la Convención Americana de Derechos Humanos y no la Comisión de Venecia que, a su juicio, es cada vez menos jurídico y más político.