Andrés Gómez Vela
- Es una respuesta a la soberbia del gobierno que destituyó, de forma justificada o no, al exgobernador Ernesto Suárez Sattori; el triunfo de Lens, de un modo u otro, también es el triunfo de Suárez.
- El electorado boliviano, en este caso beniano, es más inteligente de lo que creen los políticos oficialistas, pues, no venden su consciencia por obras de última hora o prebendas.
- La derrota de Jessica Jordan también es la derrota de Evo Morales y el fracaso de su ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, porque el primero fue jefe de campaña de facto, entregando obras y usando bienes públicos para pedir el voto en favor de la candidata de su partido; y el segundo fue la persona que hizo un trabajo intenso en esa región y se jugó por Jordan.
- El triunfo de Lens no es el triunfo de la derecha como pretende hacer creer el MAS, sino el triunfo de un grupo político contra el autoritarismo expresado por el partido de gobierno en espacios como el Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS).
- El apoyo a la oposición es una forma de expresión contra la opulencia mediática y la soberbia megalómana ejercida por las autoridades masistas en diferentes circunstancias, no sólo en el departamento del Beni, sino también en otras regiones.
- Una candidata prestada, sin genes políticos socialistas como Jessica Jordan, no es la fórmula para ganar en el Beni; aunque le fue bien al MAS con un candidato ex mirista en las municipales de Punata, pero no así en Bermejo, donde perdió frente a un candidato independiente. Le hubiera ido mejor con un candidato salido de las bases masistas.
- Los resultados demuestran que la vieja contradicción entre izquierda Vs. derecha comienza a ser superada por una nueva: Demócratas Vs. Autoritarios, pues, demócrata no sólo es aquel que gana una elección, sino que procede según las reglas democráticas en todo momento y tiene el objetivo de preservar la institucionalidad estatal antes que el poder a toda costa.
- El MAS, particularmente el Vicepresidente Álvaro García, debe reconocer que si bien no hay librepensantes en su partido, sí hay y de sobra en la sociedad, a quienes no se impone el o la candidata o se los vence con estrategias envolventes, sino que se los convence con teoría y práctica consecuentes.
- En caso de que haya segunda vuelta en el departamento del Beni, los masistas deberían replantear su estrategia, pues, seguir sosteniendo que la ultraderecha y la oligarquía ganaron en el Beni en la primera vuelta, puede dar como resultado final que los oligarcas y derechistas de verdad crezcan más y más.
- Es sorprendente ver al partido ganador de muchísimas elecciones comenzar a conformarse con el segundo lugar y a hacer conejitos para llegar a la segunda vuelta, lo que tiende a demostrar su prematura decadencia.
- Es cierto que respecto a las elecciones pasadas el MAS creció en el Beni, pero la expectativa era un triunfo, teniendo ahora todo el aparato del Estado en favor de su candidata.
- La oposición no debiera tomar este resultado como una proyección con miras a las elecciones nacionales de 2014, porque son ámbitos diferentes, donde el candidato oficialista Evo Morales todavía tiene amplia ventaja; sin embargo, el masismo tampoco debiera asegurar a Morales como imbatible, pues, a diferencia de años anteriores, ya no suma votos cada día, sino, resta.