“Garantizar la cobertura de la señal de internet en los territorios y comunidades indígenas para posibilitar el acceso a la educación escolar virtual de nuestros niños, niñas, adolescentes y jóvenes (…) y adultos mayores”, dice el pronunciamiento de 20 organizaciones indígenas de Bolivia.
El pasado 13 de marzo, el gobierno central suspendió las clases en los colegios y las universidades por la emergencia sanitaria causada por el Covid-19. Dadas las circunstancias, es incierto el retorno a las aulas en los próximos dos meses.
Ante esta situación, los centros educativos optaron por la educación a distancia apoyados en las nuevas tecnologías de información y educación. Según datos oficiales, sólo el 16% de la población boliviana tiene acceso a internet conexión fija.
El pronunciamiento también pide acceso a los servicios de salud integral con enfoque intercultural en los territorios indígenas.
“Definir un plan de acción en coordinación con nuestras autoridades indígenas para el acceso a alimentos para garantizar la seguridad alimentaria de nuestras familias y comunidades”, indica otro punto del documento.
Las 20 organizaciones también exigen paralizar todas las actividades extractivas (madera, minería, hidrocarburos y el monocultivo) en los territorios indígenas para no repetir el ecocidio del 2019.
Otra de las exigencias señala la necesidad de banca móvil y un fondo de emergencia para los pueblos indígenas.
“Proponemos la instalación de mesas de coordinación multisectorial permanente en los nueve departamentos del país y una mesa nacional con la participación de ministerios (…) para definir políticas y acciones que den una respuesta integral a nuestras problemáticas y demandas”, dice otro punto del pronunciamiento.
Entre sus demandas, los pueblos indígenas pidieron, además, campañas informativas en sus idiomas originarios y respeto a su libertad de expresión.
