Don Jhon José Aima Fernández había terminado de vender en Parajaya, Oruro, la comida que preparó para ese jueves 4 de mayo, cuando fue interceptado en su jeep blanco (foto 1) por funcionarios militares, quienes le indicaron que baje de su auto. Al ver que estaban armados, bajó. Luego, le ordenaron que se arrodille, se negó. Entonces le dispararon y la bala paso por el dedo índice de su mano derecha. El hecho sucedió en la tarde, a eso de las tres, informó a Rimay Pampa una persona que pidió reserva de fuente.
El reporte de la Policía de Sabaya al Comando de Oruro coincide con la descripción del vecino.
“A hrs. 15:00 aprox. Del día Jueves 04 de Mayo del año en curso, en el Cantón de Parajaya de la Provincia de Sabaya, el Sr. Jhon José Aima Fernández una vez terminada su venta de comida fue interceptado por Funcionarios Militares, en el cual lo indicaron que se baje del Vehículo utilizando armas de fuego”, indica el reporte.
Posteriormente, sigue el reporte, “el mencionado se bajó del vehículo y le indicaron que se arrodille, él se negó y los militares supuestamente lo dispararon y la bala pasó por dedo índice de la mano derecha”.
Luego, “fue enmanillado y le subieron a su propio vehículo llevándole hacia la Provincia de Todo Santos, en el transcurso del traslado el vehículo tubo (sic) un hecho de tránsito, en el Cantón de Ocoaque, donde los Militares se estaban dando a la fuga, y dos pobladores les agarraron y en ahí apareció un vehículo color plomo en el cual se los traslado a los Militares”, señala el informe policial.
“Y el Sr Jhon José Aima Fernández fue ayudado por los pobladores y llevado al centro de Salud más cercano y a horas 06:30 aprox. de hoy Viernes 05 del presente se presentó a la Oficina de Policía de Pisiga-Bolívar a formalizar su denuncia, y a horas 08:00 se los remitió a la Ciudad de Oruro”, concluye.
De acuerdo con una fuente vinculada a la Aduana, “los F10 (grupo especializado para acciones militares y que cuenta con francotiradores) dispararon contra el propietario de un jeep, pero creo que se equivocaron porque el propietario (John José Aima) dijo que todo estaba en regla y que los iba a demandar”.
“Cuidado, son altos niveles”.
Tras recibir la denuncia, Rimay Pampa se contactó con un militar, quien declaró en reserva: “No son de los nuestros, creo que es gente que se está queriendo hacer pasar por los UCAS (Unidad de Control Aduanero)”.
El militar pidió tener cuidado en la investigación porque “son altos niveles” e identificó el vehículo que usan: Nissan Patrol, color plomo, con placa de control 4425 ETC. “Son cinco y visten uniformes negros y (actúan) cubiertas las caras”, indicó.
“Se entraron a mi casa”.
El mismo 4 de mayo pasado, a eso de las nueve de la mañana, la casa de Doña Esperanza Gutiérrez fue allanada también por militares aduaneros vestidos con uniforme camuflado. No se sabe si es el mismo grupo que quiso detener al señor Ayma u otro.
Esperanza Gutiérrez tiene su casa a 200 metros del hito 24 de la frontera con Chile. “Sólo estaban mi hijo (21) y mi hija (28); ellos me han contado que los militares aduaneros se entraron a la casa rompiendo la ventana”, narró en contacto telefónico con Rimay Pampa.
Según la afectada, eran dos vehículos de la Aduana, ambos Nissan Patrol, uno beis y el otro plomo (Fotos, izquierda y derecha); en cada uno habían dos militares.
“Es la tercera vez que se entran a mi casa, son unos abusivos, la próxima vez los voy a quemar con gasolina; si no hay justicia para mí, que no haya para ellos”, advirtió.
Dirigentes originarios denuncian torturas
Las denuncias de abusos y excesos no terminan en esos dos casos. El pasado 30 de abril, dirigentes originarios de poblaciones ubicadas en la Provincia Mejillones, Oruro, enviaron una carta a la Aduana Nacional para denunciar “torturas, maltratos y sustracciones de dinero”.
“Identificadas las movilidades de la patrulla de esa fecha son: Ipsun Blanco con placa La Paz y un Nissan Patrol Plomo de la izquierda abollado”, indica la carta que tiene cinco firmas y tres sellos.
