ANSA
Un número creciente de niños están siendo asesinados o forzados a tomar las armas por grupos armados en los conflictos que azotan las fronteras de Níger con Malí y Burkina Faso, denunció Amnistía Internacional en un nuevo informe.
«En la región de Tillaberi en Níger, una generación entera está creciendo rodeada de muerte y destrucción», afirmó Matt Wells, subdirector de Amnistía para la respuesta a las crisis.
«Los grupos armados atacaron repetidamente escuelas y reservas y están tomando en la mira a niños para el reclutamiento», agregó en un comunicado.
Amnistía atribuye la responsabilidad de la violencia al Isgs, el grupo yihadista (EI o ISIS) subsahariano y las milicias islámicas Jama’at Nusrat al-Islam wal-Muslimin (JNIM), afiliadas a al-Qaeda.
El informe de 57 páginas documenta el impacto en los niños del conflicto en Tillaberi occidental de Níger, una vasta área de 100,000 kilómetros cuadrados en las fronteras de Mali y Burkina Faso, que alberga a varios grupos étnicos como djerma, fulani, tuareg y hausa.
Según la organización de monitoreo de los conflictos Acled, citada por Amnistía, la violencia contra los civiles elevó a 544 las muertes ligadas al conflicto desde enero al 23 de julio de este año, superando ya las 397 personas muertas en todo el 2020 «Los grupos armados mataron a más de 60 niños en el área de las tres fronteras de Níger en 2021», afirmó el reporte, añadiendo que el ISGS, que opera principalmente en el límite con Mali, parece responsable de la mayoría de las matanzas a gran escala.