A través de compras, asociaciones e inversiones en medios de comunicación, la familia presidencial nicaragüense pretende controlar el contrapoder de la prensa y centraliza la información en la vicepresidenta Rosario Murillo, como una forma de afianzar su poder político y económico.
“ Vamos a usar nuestros medios, para que nuestra información salga incontaminada, directa”, remarca la Estrategia de Comunicación del Gobierno de Reconciliación y Unidad Nacional (ECGRUN) que se conoció en 2007.
“Es cierto, compramos Canal 8 y qué tiene de extraño que aparezca ALBA-TV”, dijo Paniagua en una entrevista.
“Tenemos varios puntos de preocupación, en particular la concentración de medios en pocos propietarios, entre ellos, la familia del presidente de la República y Ángel González, que en general es un empresario que pone los medios a disposición de los gobiernos, por lo tanto, eso genera poco pluralismo”
“No existe ningún tipo de censura a los medios de comunicación; ni se les impide su circulación y difusión”
“Olvidate del periodismo en que ustedes van a determinar lo que se publica o no. Ustedes no son los que mandan en el país”