Agencias.- Cristina Fernández de Kirchner tendrá que afrontar un juicio acusada de los delitos de asociación ilícita y administración fraudulenta. La Justicia le embargó 10.000 millones de pesos, unos 567 millones de dólares.
La Justicia confirmó el juicio por asociación ilícita y defraudación al Estado, como también el embargo de 10.000 millones de pesos sobre su patrimonio, ordenado en la causa que investiga el desvío de fondos de la obra pública vial a favor del Grupo Austral. Cristina volverá además, la semana que viene a los Tribunales de Comodoro Py para declarar en otra causa que la vincula con Lázaro Báez -preso por lavado de activos-.
La Cámara Federal de Casación Penal rechazó un recurso legal que la exmandataria y senadora electa por el frente opositor Unidad Ciudadana había presentado y así dejó el caso en la instancia previa al juicio, publicó el Centro de Información Judicial (CIJ).
Asociación para robarse dineros públicos destinados a obra civil
La Justicia investigó a Fernández de Kirchner por una supuesta manipulación de la adjudicación de obra pública durante su Gobierno en beneficio del empresario Lázaro Báez, que se encuentra detenido desde abril de 2016.
Según el juez Julián Ercolini, la expresidenta y otros acusados en el caso «habrían formado parte de una asociación destinada a cometer delitos para apoderarse ilegalmente y de forma deliberada de los fondos asignados a la obra vial, en principio, en la provincia de Santa Cruz», situada en el sur del país y donde el kirchnerismo forjó su carrera política. El juez indicó que la maniobra «habría perjudicado los intereses confiados al violar su deber de administrar y cuidar fielmente los bienes del Estado nacional (…) con el fin de procurar un lucro indebido propio o de terceros, como por ejemplo, del empresario Lázaro Báez».
Además de Kirchner está procesado en la causa su exministro de Planificación Julio De Vido, apresado el 25 de octubre último en otra investigación luego de que la Cámara de Diputados anulara el beneficio de la inmunidad parlamentaria del que gozaba por ley.
Será el segundo juicio que Kirchner afronte luego de dejar la presidencia argentina en 2015. La Justicia estableció en julio pasado que en 2018 la exjefa de Estado argentina se siente en el banquillo de los acusados por presuntamente cometer irregularidades en una operación financiera del Banco Central de la República Argentina con el dólar a futuro, que era comercializado a valores más bajos de los de mercado, una maniobra que habría generado pérdidas millonarias para el Estado.